Lugar intrínseco que intimida con silencio enamorado
Refugio pintado con vestigios de tus nacimientos
Silla de madrugada, reloj viviendo
Perros persiguiendo partes perdidas de sus almas
Bulevares que miran encandilados, el danzar juvenil de ciertas aficionadas de la libertad
Murales añejos anunciando tiempos de cambio
La cruz de los pecadores, el vino olvidado
La ciudad vieja, ensueños de inmigrantes borrachos
Trenes que sólo transportan historias de amor y odio
Actores que se desangran por las virgenes que algunos dioses olvidaron
Cigarro que termina de respirar, puerta que cierra
Bendiciones del final de los tiempos
Salida temporal, bandera brillando.
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